La circulación aérea en cinco aeropuertos argentinos se verá mejorada con la reciente incorporación de tecnología satelital. Las modificaciones introducidas reducen los tiempos de vuelo, el consumo de combustible y las consecuentes emisiones en la atmósfera.
En Ezeiza y Aeroparque Jorge Newbery se mejoraron las trayectorias originales de los aviones gracias a las señales satelitales y la tecnología PBN.
En Neuquén, la tecnología PBN se complementa con la aproximación de los equipos tradicionales de aproximación en tierra. Las mejoras incrementan la seguridad operacional gracias a la mayor precisión y la redundancia los sistemas convencionales. Cabe destacar que se diseñaron nuevas trayectorias PBN para toda el área terminal Neuquén.
En Córdoba, en cambio, se implementaron nuevos procedimientos de aproximación a la cabecera de pista 05. Se trata de una solución de contingencia mientras se realizan trabajos de infraestructura en pista la 18-36.
El aeropuerto de Rosario también se benefició con el diseño de nuevos procedimiento basados tanto en sistemas convencionales como en la tecnología PBN. Las reformas permitirán reducir los vuelos en un total estimado en 52.700 millas náuticas (94.860 km) o, en combustible, un ahorro 184.045 kg lo que reduce las emisiones de CO2 en 581.031 kg al año.
La disponibilidad de más y mejores cartas de aproximación en los aeropuertos aporta grandes beneficios para las regiones circundantes, gracias a la reducción de las demoras, menores desvíos y cancelaciones de vuelos por condiciones meteorológicas desfavorables. Esto significa una mayor confiabilidad para todo el sistema de navegación, tanto en seguridad operacional como en el servicio provisto a las aeronaves.
Las inversiones fueron realizadas por EANA – Empresa Argentina de Navegación Aérea SE, que depende del Ministerio de Transporte de la Nación.