Concluyeron las pruebas técnicas previas a la plena puesta en servicio del nuevo radar del aeropuerto Justo J. de Urquiza, de Paraná, que brindará mejor cobertura y precisión en la vigilancia del tránsito aéreo, elevando la seguridad operacional.
El nuevo radar secundario fabricado por la empresa INVAP sustituye al radar Alenia, de 23 años de antigüedad y vida útil cumplida.
El sistema, del tipo secundario monopulso, cumple con las recomendaciones y estándares tanto de la Organización de la Aviación Civil Internacional (OACI) como de EUROCONTROL, la Organización Europea para la Seguridad de la Navegación Aérea.
El sensor de Paraná ingresó ahora en una última etapa previa a su operación como radar secundario estándar en un área clave del espacio aéreo argentino. El nuevo radar proveerá vigilancia en ruta al norte de la Región de Información de Vuelo (FIR) Ezeiza. Su radio de cobertura de aproximadamente 250 millas náuticas (450 km) con centro en el aeropuerto de Paraná abarca rutas empleadas por numerosos vuelos regionales e internacionales.
A diferencia de un radar primario, que sólo puede ver y mostrar un eco, un radar secundario brinda al control aéreo información de cada uno de los vuelos, tanto como la matrícula, el indicativo de llamada (número de vuelo) y la altitud a la que vuela una aeronave.
Además de la adquisición de este nuevo radar, y como parte del convenio marco firmado entre EANA e INVAP en noviembre del año pasado, EANA confió a la empresa rionegrina el mantenimiento –preventivo y correctivo– de los 22 radares RSMA (Radar Secundario Monopulso Argentino) que ésta ya había construido e instalado en todo el país. Asimismo, varios de dichos radares serán modernizados gradualmente para equipararlos al de Paraná, incorporando lo último en tecnología y elevando los niveles de seguridad operacional de la navegación aérea argentina.
Dentro de esta modernización está incluido el flamante radar de Paraná. El proyecto contempla que en 2020 se incorporen nuevas tecnologías de vigilancia, como el modo operativo S y ADS-B, que son inéditas en la Argentina. Con ellas se incrementará la conciencia situacional de los controladores aéreos y la seguridad operacional, brindando a la vez una mayor eficiencia en la prestación del servicio de vigilancia.
La funcionalidad ADS-B, en cambio, permitirá al control aéreo en ruta y precisar la posición de las aeronaves mediante la información que los sistemas de éstas emiten periódicamente a través de sus equipos de navegación satelital. La configuración del sistema permitirá realizar observaciones más precisas y confiables. Por su parte, al pasar a operar el año próximo en modo S, brindará a los controladores aéreos más información –actual y anticipada– respecto de las aeronaves observadas.
En junio de este año, EANA adquirió a INVAP también tres nuevos radares primarios, destinados a las áreas de mayor concentración de movimiento de aeronaves: el Área Terminal Baires, Córdoba y Mendoza. Ezeiza contará asimismo con un radar de superficie que permitirá elevar la categoría operativa del aeropuerto en condiciones de muy baja visibilidad. Todas estas inversiones se realizan como parte de un amplio plan de desarrollos e inversiones de alcance nacional, por valor de unos US$ 120 millones.