Nex Generation ayuda en el Golfo

El Golfo de México tiene una extensión de 600.000 millas cuadradas. Allí operan casi 4000 plataformas petrolíferas y gasíferas, que dependen principalmente de helicópteros para su abastecimiento y relevo de personal. Es una zona donde volar es difícil incluso para los pilotos más experimentados.

Diariamente, las compañías de helicópteros realizan entre 5000 y 9000 vuelos en apoyo de las plataformas. Para mejorar el servicio, estos operadores comenzaron a usar tecnologías desarrolladas por la Federal Aviation Administration (FAA) denominadas NextGen (Next Generation Air Transportation System), el nuevo sistema de control de tránsito aéreo que está en proceso de implementación en los EEUU, que emplea satélites en reemplazo del sistema tradicional de control terrestre.

La tecnología GPS permite acortar las rutas, ahorrar tiempo y combustible, reducir las demoras, incrementar la frecuencia y permitir a los controladores supervisar y administrar las aeronaves con un mayor margen de seguridad.

Uno de los componentes del NextGen es el ADS-B (Automatic dependent surveillance-broadcast, que emplea señales del GPS para proporcionar información mucho más precisa sobre la ubicación de las aeronaves y que permite mantener la separación entre las mismas, tanto en vuelo como durante el rodaje, y posibilita a los helicópteros volar hacia las plataformas petrolíferas en el mar en pésimas condiciones meteorológicas que antes hubiesen forzado a cancelar los vuelos. Para una compañía, esto significa incrementar las horas de vuelo durante períodos de baja visibilidad de 1500 a casi 20.000.

Hasta 2009, cuando debía realizarse un vuelo en condiciones instrumentales sobre el Golfo, la FAA asignaba a cada vuelo un espacio de 20 x 20 millas náuticas (cuando no cancelaba el vuelo). Esto creaba problemas debido a la gran densidad de vuelos en la zona (los que a menudo se adentran 200 millas náuticas en el Golfo).

En ese año, la FAA acordó con los operadores de helicópteros, los propietarios de las plataformas y la Helicopter Internacional Association, la instalación por parte del gobierno de los EE.UU. de trasmisores ADS-B en la zona junto con equipos meteorológicos y de comunicaciones en 12 plataformas. Por su parte, los operadores equiparon sus aeronaves con aviónica ADS-B. De esta forma, los controladores pueden proporcionar a los helicópteros volando sobre el golfo el mismo servicio de tránsito aéreo que sobre tierra, y así los helicópteros vuelan ahora usando la misma distancia normalizada de separación de 5 millas.

Fue así que una compañía pudo realizar 32 vuelos en la Navidad de 2012, bajo pésimas condiciones de visibilidad. El sistema permite ahorrar combustible, pero su mejor ventaja es que permite mantener un cronograma de vuelos predecible, lo que posibilita a las plataformas desarrollar su actividad con gran predictibilidad.

Esta tecnología está llevando entonces a normalizar el cronograma de vuelos. Como se ha mencionado, durante 2012, una sola compañía voló 19.942 horas bajo reglas de vuelo instrumental, contra un promedio anual de 1.500 horas antes de implementar el sistema ADS-B.

Fuente: FAA  Trad. Bruno y Viviana Varani

Te interesará

Los comentarios están cerrados, pero trackbacks Y pingbacks están abiertos.

AeroMarket - Noticias Aeronáuticas e Interés General. Copyright © 2018 Todos los Derechos Reservados.
Quiénes Somos       Contacto

Diseño y Desarrollo Web - Emiliano Gioia