“Cuando el CEO de Lilium, Daniel Wiegand, me preguntó hace unos meses si aceptaría un nombramiento para la junta de Lilium no tuve que pensarlo mucho. Lilium, a diferencia de casi cualquier otra compañía de aviación en Europa, representa un espíritu pionero y fresco, para un nuevo campo que está apareciendo. Ese espíritu pionero de innovación y coraje empresarial me ha cautivado e impulsado a lo largo de casi 30 años de carrera en la industria aeroespacial”, dijo Tom Enders, ex presidente de Airbus, en el blog de la compañía de la que comenzó a ser parte.
Lilium tal vez sea una de las cinco compañías más prometedoras en el transporte aéreo urbano, es decir, en el gran paso que está dando la humanidad en materia de transporte en las ciudades.
Hace unas semanas Aeromarket publicó un artículo sobre el crecimiento de Lilium, por lo que los lectores del medio no se sorprenderán al informarse que un hombre de negocios como Enders podría aportar mucho al proyecto.
“La idea de los taxis aéreos no es nueva, se remonta a más de 50 años (…) pero sólo ahora se dan todas las condiciones para hacer de esa visión una realidad técnica rentable gracias a las nuevas baterías, digitalización, computadoras de alto rendimiento, inteligencia artificial, navegación de alta precisión, materiales avanzados y nanotecnología (…) En resumen, este es el momento de los taxis aéreos eléctricos (…)”, agregó Enders en su nota de presentación.
La empresa tiene un potencial enorme, cuenta con inversores muy importantes y ya firmó acuerdos de servicios con los aeropuertos de Düsseldorf y Colonia/Bonn, de Alemania y proyecta establecer un HUB en la Florida, Estados Unidos.
Algunos ingenieros han criticado técnicamente el diseño de la aeronave y hasta dudan que el vehículo que tiene 36 rotores pueda lograr un alcance de 300 kilómetros. Sin embargo, Weigand, CEO de la Startup, aseguró que el equipo ya está pensando en una aeronave más grande y cómoda que mejore la experiencia de vuelo de los pasajeros, lo cual confirma su confianza en la tecnología que se está desarrollando.
Los años de Enders en Airbus fueron complejos y hasta turbulentos. Bajo su gestión lidió con el Airbus A380, que no resultó como se pensó; con el A400M, que tuvo serios problemas técnicos y hasta un accidente. También tuvo que hacer frente a rumores sobre irregularidades en la administración de la empresa y contratos militares no muy transparentes. De cualquier forma, la carrera de este ejecutivo ha sido brillante y su aporte a la industria naciente del transporte urbano eléctrico podría ser enorme.
