El fabricante Boeing ha asumido el compromiso de que sus aviones comerciales serán capaces –y estarán certificados– para volar con combustibles 100% sostenibles en menos de 10 años, más precisamente para 2030.
Boeing ya se sumó en el pasado a quienes sostienen que el cambio climático es causado por el CO2 y ha realizado pruebas exitosas reemplazando el combustible convencional derivado del petróleo.
En la actualidad, los combustibles de aviación clasificados como sostenibles se mezclan con el combustible convencional en mitades iguales conforme al máximo permitido en las especificaciones gubernamentales. Para cumplir con el compromiso de la aviación de reducir las emisiones de carbono en un 50% con respecto a los niveles de 2005 para 2050, los aviones deberán volar con combustibles de aviación totalmente sostenibles mucho antes de ese año.
“Nuestra industria y nuestros clientes están comprometidos a abordar el cambio climático, y los combustibles de aviación sostenibles son la solución más segura y medible para reducir las emisiones de carbono de la aviación en las próximas décadas”, dijo Stan Deal, presidente y director ejecutivo de Boeing Commercial Airplanes. “Estamos comprometidos a trabajar con reguladores, compañías de motores y otras partes claves interesadas para garantizar que nuestros aviones y, finalmente, nuestra industria puedan volar completamente con combustibles sostenibles para aviones”.
El compromiso de Boeing es determinar qué cambios requieren sus aviones comerciales actuales y futuros para volar con combustibles 100% sostenibles, para lo cual se propone trabajar con las autoridades reguladoras y el resto de la industria para aumentar el límite de mezcla para un uso ampliado.
Boeing trabajó globalmente con aerolíneas, los gobiernos, socios de la industria e instituciones de investigación para utilizar combustibles de aviación sostenibles con el objetivo de expandir las opciones de suministros limitados y reducir el costo de esos combustibles, ya que la producción de esos combustibles es mucho más onerosa que los derivados del petróleo.
Boeing, en colaboración con aerolíneas, fabricantes de motores y otros socios realizó vuelos de prueba con biocombustible a partir de 2008 y obtuvo la aprobación para utilizarlos en 2011. Poco después, en 2018, el programa de prueba de vuelo ecoDemonstrator de Boeing realizó el primer vuelo de un avión comercial en la historia con combustibles 100% sostenibles, al utilizar un 777 Freighter, operado por FedEx Express.
Los combustibles de aviación sostenibles se pueden fabricar a partir de una amplia variedad de materias primas, incluidas plantas no comestibles, desechos agrícolas y forestales, desechos domésticos no reciclables, gases de escape de plantas industriales y otras fuentes. La sostenibilidad de los combustibles se garantiza a través de certificaciones de sostenibilidad serias y creíbles de organizaciones de terceros, como la Mesa Redonda sobre Biomateriales Sostenibles.
