Afuera “Mercado Livre” vuela
La foto de la semana fue la del avión ploteado con los colores de Mercado Livre, una empresa creada por argentinos y en la Argentina que evidentemente se expande mejor fronteras afuera que en su propio hogar. El avión que se publicó por todos lados vuela por los cielos de Brasil, donde se puede crecer y volar aún en pandemia. Según información que llega a Aeromarket, en Méjico ya volaba una aeronave con el logo de la empresa más valiosa de la Argentina. Es triste pero comprensible que Mercado Libre crezca en el exterior ya que aquí era acosada por los Moyano y, desde hace unas semanas, por una nueva aventura llamada Correo Compras que más que un desafío comercial es una provocativa cosquilla a la compañía de retail que fundara el creativo empresario Marco Galperin.
Una curiosidad: El avión de Mercado Livre, tal su nombre en portugués, es amarillo y a la distancia casi se confunde con una aeronave de Flybondi, otra empresa argentina que algunos pocos, pero poderosos, quisieran desaparecer. Pareciera que sectores del Gobierno Nacional aborrecen el amarillo y mucho más si vuela. ¿Será por reminiscencias de festejos políticos con globos de ese color?
Mercado Libre juega inteligentemente, arma modelos de negocios innovadores allí donde la dejan evolucionar, lo cual se traduce siempre en creación de trabajo que en este caso son oportunidades laborales de gran calidad y porvenir. En Brasil, Galperin y su equipo llegaron a acuerdos con diversas compañías aéreas para mejorar su sistema logístico, algo que aquí, con el trío inefable de Aerolíneas Argentina, APLA y ANAC sería impensable. Pero la verdad tarde o temprano surge y lo que ya se ve es que Mercado Libre genera vuelos en Brasil, es decir incrementa el trabajo de pilotos, técnicos aeronáuticos, controladores de tránsito, entre otros, que no hubieran contado con esa actividad si el crecimiento del famoso unicornio no se estuviera produciendo. Es sencillo de entender.
¿Llamará la muy difundida foto a la reflexión?
Se verá.
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Otra que se va
Acciona Airport Services deja el país. Otra más que parte. La empresa, que prestaba servicios de handling (facturación, embarque, venta de pasajes, entre otros) a JetSmart en El Palomar, informó que no seguirá con su operación local. Si bien la situación internacional es delicada para toda la industria aeronáutica, en la Argentina la incertidumbre y el desaliento parecen ser, por acción u omisión, política de Estado, sobre todo si los negocios, además de estar vinculados al transporte aerocomercial, se prestan a repudiadas aerolíneas low cost en un aeropuerto de imprevisible futuro.
La salida de Acciona Airport Services es grave porque la decisión tendrá un costo doloroso: 50 puestos de trabajo menos.
El contexto es abrumador, “no autorizan itinerarios, no se define la situación de El Palomar, no oficializan que Ezeiza sea el único aeropuerto, no confirman el regreso del turismo interno, no toman decisiones que ayuden a la actividad, todo es negativo ¿cómo se iban a quedar en un país como este?”, dijo a Aeromarket, un gerente vinculado a una de las low cost que operaban desde el Aeropuerto Internacional El Palomar.
¿Seguirá la fuga de compañías?
Se verá.
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Final para el entorno virtual y algo más
El 12 de octubre venció la vigencia inicial de la Resolución 169 de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), que habilitaba la capacitación en entorno virtual, en consecuencia no se pueden implementar nuevos cursos.
La situación es grave: ni clases presenciales ni a distancia. Es como un “arréglense como puedan”. Una actitud propia de la eficiencia dominante. “Funcionarios que no funcionan”, diría la vicepresidenta de la Nación. La NO MEDIDA sorprende porque las circunstancias que llevaron a redacción y firma de la Resolución no han variado, es más, su propio texto preveía la posibilidad de prórroga.
No sería justo generalizar la incompetencia porque, al menos en materia educativa y operacional, existen ciertas voluntades en la ANAC que extendería –y hasta lo haría de forma definitiva– la vigencia de la Resolución. Sin embargo, la traba estaría ubicada bien alto en la cadena de decisiones de la aviación civil. Incluso, según las fuentes de Aeromarket, se sospecha la presión por discontinuar la metodología e-learning vendría de afuera del ente formal que regula la aviación civil. “Las miradas conducen a la porteña calle Lezica”, sugiere un empleado de ANAC que, a pesar de estar en el ambiente hace años, no deja de sorprenderse por la inagotable creatividad destructiva que observa. La negación es otro contraste entre el modernismo y el amor por el estancamiento, sino cómo se podría explicar que la metodología e-learning que en el mundo se desarrolla constantemente, se frene en la Argentina.
Igual hay que superar lo negativo y cabe reconocer la labor silenciosa de muchos integrantes de ANAC que trabajan más allá de sus posibilidades y hasta construyen atajos para sortear prohibiciones o barricadas burocráticas. No todo está perdido. Un alivio.
En ese espíritu se debe apuntar, aunque en cuestiones aeronáuticas no sólo vinculadas a la capacitación, que se estaría avanzando en los temas que se trataron en la reunión que mantuvo el Consejo Consultor de Aviación Civil (CONAV) con algunos directores de ANAC hace unos cuantos días. Al menos eso es lo que dicen algunos funcionarios que funcionan, quienes, además, aseguran que en los próximos días se citaría al Consejo a una nueva reunión para seguir adelante con asuntos pendientes.
Se verá.
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Terminó la modernización de la torre de control de Tucumán
El pasado martes 3, se celebró con una suerte de inauguración la modernización de la torre de control del aeropuerto Benjamín Matienzo, de la ciudad de San Miguel de Tucumán.
La modernización tiene por objetivo brindar un servicio más eficiente al mejorar las condiciones de trabajo de los profesionales de tránsito aéreo.
La ceremonia fue muy concurrida ya que contó con el gobernador de la provincia, Juan Manzur; el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Sergio Massa; el ministro de Transporte, Mario Meoni; el jefe del Estado Mayor General de la Fuerza Aérea Argentina, brigadier Xavier Isaac y la titular de la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA), Gabriela Logatto entre otras varias decenas de funcionarios.
Los trabajos de modernización y actualización funcional se iniciaron el pasado 20 de junio, y contaron con un presupuesto general de 12,5 millones de pesos, 8,6 destinados a la obra civil y eléctrica y a un área de intervención de 200 metros cuadrados, y 3,9 millones en infraestructura de comunicación y navegación aérea (CNS).
La obra mejora las condiciones edilicias, la optimización de las instalaciones de los puestos de trabajo de la cabina, la incorporación de una sala de descanso y el rediseño de las áreas comunes. También se montó un moderno sistema de control de incendios y se renovó completamente la instalación eléctrica, lo que significa un cambio fundamental para la operación de la torre al garantizar el suministro de manera segura y eficaz a todo el equipamiento.
Durante el período que duraron las refacciones, un acuerdo alcanzado por EANA con la Fuerza Aérea Argentina (FAA) permitió que el aeropuerto siguiera operando gracias a la colocación de una torre desplazable desde la cual se continuó brindando el servicio de control.
Esta obra se suma a una gran inversión que se ha realizado en el aeropuerto tucumano en los últimos años, las cuales comprendieron el diseño de trayectorias instrumentales basadas en señales satelitales, la renovación del ILS, la instalación de un nuevo radio-faro VOR, la actualización de los radares secundarios y la ampliación de plataformas, entre otras mejoras.
El aeropuerto Benjamín Matienzo cuenta con la segunda pista más larga de la Argentina y reviste gran importancia a nivel nacional gracias a los vuelos cargueros a Santiago de Chile y Miami, que llevan la producción tucumana de limones, arándanos y otras frutas finas, así como de otros productos de exportación, inclusive maquinarias de la producción local de automotores.
Según la información de EANA esta obra es “el puntapié inicial de nuestro Plan Federal de Modernización de torres de control que tienen más de 30 años sin ninguna intervención”. Raro ¿no se había construido una nueva torre de control en Aeroparque a mediados de 2017 y se estaba construyendo otra en Ezeiza y San Fernando? Respecto a la construcción de este último aeropuerto es posible afirmar que hoy por hoy la obra está detenida, aunque seguramente se continuará a la brevedad. Cuando se conozca el plan de EANA tan ampliamente difundido puertas adentro se podrá saber más.
Se verá.