Singapur es una ciudad-estado de 728 km2 con una población de 5.637.000 personas que está compuesta por inmigrantes de todo el mundo. Está ubicada en el sudeste asiático.
La economía de Singapur tiene uno de los marcos regulatorios más abiertos y favorables para la creación de empresas en un mercado altamente competitivo.
La historia de esa nación muestra con claridad cómo se puede pasar de ser una sociedad extremadamente pobre a registrar un ingreso nacional bruto per cápita de US$ 70.810 (2023), es decir, uno de los más altos del mundo.
En la década de 1960 esta nación insular creció gracias a las manufacturas. A principios de la década de 1970, Singapur alcanzó el pleno empleo y se sumó a las economías de mayor empuje de Asia. Hoy en día, la economía basada en servicios se suma a la producción de bienes constituyendo uno de los dos pilares de la economía de alto valor agregado de Singapur.
El crecimiento general de la economía de Singapur fue del 1,1 % en 2023. La construcción (+5,2% interanual) lideró el crecimiento de las industrias productoras de bienes, impulsada por expansiones en proyectos del sector público y privado. Las industrias de servicios registraron un crecimiento amplio, liderado por el alojamiento (+12,1% interanual) y la información y las comunicaciones (+5,7% interanual) gracias a las fuertes llegadas de visitantes internacionales y la sólida demanda de servicios de hosting de datos, respectivamente. Se espera que el crecimiento económico sea modesto en 2024, pero el gobierno pronostica un rango del 1,0 % al 3,0 %.
En el Índice de capital humano más recientemente publicado por el Banco Mundial, Singapur figura como el mejor país del mundo en desarrollo humano. Junto con un fuerte apoyo financiero del gobierno, el país continúa fortaleciendo la agilidad y flexibilidad de su fuerza laboral al brindar una educación continua cuyo programa se denomina Skillsfuture.
La logística uno de los motores del crecimiento
Según el Banco Mundial, Singapur se ha beneficiado a partir de convertirse en una centro logístico global de excelencia, de hecho, en gran parte su éxito económico se origina por ese centro logístico que es considerado el de mayor crecimiento y eficiencia de la región.
Hoy, la pequeña ciudad-estado alberga el puerto de transbordo de contenedores más grande del mundo al conectarse con más de 600 puertos en todo el planeta; mientras que el aeropuerto Changi es considerado el mejor a nivel internacional lo cual es posible, entre otras cosas, por contar con unos 6.800 vuelos semanales que unen al país con 330 ciudades.
Los logros de Singapur no se produjeron por casualidad. Son el resultado de una combinación de políticas públicas con visión de futuro y una formidable participación del sector privado.
Según un informe del Banco Mundial, el desarrollo logístico de Singapur se debe a tres factores claves: la construcción de conectividad, la infraestructura y los procesos innovadores.
En materia de aviación (como así también en el sector marítimo) Singapur vio una oportunidad en el transporte aéreo y trabajó para su desarrollo, por eso, su Autoridad de Aviación Civil (CAAS) puso prioridad en celebrar acuerdos de servicios aéreos (ASA) con 130 estados y territorios para aumentar el número de conexiones de vuelos. Esta política pública fue parte de algo mucho más vasto: la apertura a partir de acuerdos de libre comercio con más de 30 socios comerciales para mejorar su acceso a los principales mercados. De hecho fue gracias a esa apertura que muchas empresas decidieron operar desde Singapur, ya que luego de un servicio regular y eficiente comprobaron que pueden contar con conexiones frecuentes y a veces les permite que las mercancías lleguen a su destino más rápido a través de Singapur que por envíos directos.
Está claro que no se puede soslayar que Singapur tiene una posición estratégica en Asia, donde existen enormes mercados entre los que se destacan India y China.
Infraestructura y procesos innovadores
Con el tiempo, el sector logístico de Singapur ha construido infraestructura y procesos de clase mundial. El país siempre piensa en el futuro y existen varias iniciativas que apuntan a la mejora continua en cada eslabón de la cadena logística. En materia de aviación el contar con un aeropuerto moderno fue fundamental. Actualmente, hay planes para duplicar su capacidad. Es más, las empresas que operan en la región alientan a que la carga aérea utilice Singapur gracias a su infraestructura y procesos especializados.
Entre los resultados de la desregulación y apertura a los capitales, está el Parque Logístico del aeropuerto para cargas urgentes, los centros de cadena de frío para productos perecederos y las instalaciones exprés regionales para dar cabida a la floreciente actividad del comercio electrónico. El personal también recibe capacitación constante para garantizar que puedan mantenerse al día con las nuevas tecnologías y tener las habilidades adecuadas para procesar diferentes tipos de carga. Por ejemplo, uno de los centros de cadena de frío del aeropuerto fue el primero del mundo en recibir la certificación IATA CEIV Pharma para el manejo de carga farmacéutica.
Claro que para que el flujo de comercio y negocios posea una extraordinaria agilidad, Singapur lanzó la primera Ventanilla Única Nacional del mundo en 1989, que digitalizó y simplificó los procesos de aprobación de permisos comerciales. Para concretar semejante avance el gobierno tuvo que cambiar radicalmente su concepción de control para dar lugar a la facilitación del comercio, lo que llevó a coordinar 35 agencias gubernamentales. Según el Banco Mundial, en la actualidad los permisos se pueden aprobar electrónicamente utilizando un documento electrónico en cuestión de minutos. Dado que todo está en plena mejora, hoy se está trabajando en una Ventanilla Única Nacional perfeccionada que busca integrar tantas transacciones entre empresas como sea posible en una única plataforma digital.
El sector privado como motor
El gobierno reconoce la importancia de incluir al sector privado en las decisiones políticas. Con el tiempo, los operadores portuarios y aeroportuarios se convirtieron en empresas para garantizar que siguieran respondiendo a las necesidades de la industria. El gobierno también ha atraído inversores a Singapur garantizando un clima propicio para la inversión y desarrollando los incentivos adecuados para la participación del sector privado. En el presente, 20 de las 25 principales empresas de logística del mundo gestionan sus operaciones globales o regionales desde Singapur. Tener tantos pesos pesados operando motiva a las empresas locales a emular los estándares internacionales.
Para lograr el actual estándar y mejorarlo constantemente, el gobierno realiza consultas amplias con el sector privado antes de aprobar la inversión pública, lo que posibilita que la infraestructura construida satisfaga necesidades comerciales realistas. Además, el gobierno alienta al sector privado a invertir en infraestructura complementaria. Por ejemplo, operadores del sector privado como SATS y FedEx han invertido en instalaciones de carga aérea como centros de cadena de frío e instalaciones regionales de carga exprés. El gobierno también ha fundamentado satisfactoriamente cada vez que se propones realizar inversiones. En otras palabras, los desafíos se resuelven juntos, de modo que la inversión tenga sentido comercial para el sector privado. Una asociación sólida con el sector privado garantiza que las iniciativas sean comercialmente sostenibles a largo plazo y no se conviertan en una carga para los fondos públicos.
Estos tres factores, conectividad, infraestructura y procesos, sumados a la participación del sector privado, crean un ecosistema integrado que permite que la logística prospere.
Cielos abiertos
La base del desarrollo aeronáutico de Singapur es la política de cielos abiertos y competitivos. El marco amplio y desregulado para los servicios aéreos y los enlaces entre ciudades ha ayudado a Singapur a crecer como un centro aéreo clave en la región de Asia y el Pacífico, tanto en materia de conexión como para crecer como centro de mantenimiento de aeronaves y capacitación profesional.
Para lograr su posicionamiento, esa ciudad-estado adoptó un enfoque mutuamente beneficioso al negociar acuerdos bilaterales de servicios aéreos (ASA) con otros países. Singapur ha celebrado acuerdos de servicios aéreos con más de 130 países y territorios. Los acuerdos incluyen más de 60 convenios de cielos abiertos que permiten a las aerolíneas operar cualquier número de vuelos entre y más allá de ambos estados signatarios. Esto ha permitido aprovechar el tráfico de terceros países para mejorar la viabilidad comercial de los vuelos regulares.
Singapur es parte del Acuerdo Multilateral sobre la Liberalización del Transporte Aéreo Internacional (MALIAT), un histórico Acuerdo de Cielos Abiertos (AOS) para liberalizar el transporte aéreo internacional que fue firmado el 1 de mayo de 2001, este acuerdo histórico marcó el primer AOS multilateral entre países de diferentes regiones geográficas.
Singapur promovió la liberalización completa de los servicios aéreos dentro de la Asociación de Naciones de Asia Sudoriental (ASEAN), fue así que constituyó el Acuerdo Multilateral sobre la Plena Liberalización de los Servicios de Transporte Aéreo (MAFLAFS) que permite servicios ilimitados de carga aérea dentro de la región; y también es parte del Acuerdo Multilateral sobre Servicios Aéreos (MAAS) que prevé servicios ilimitados de pasajeros aéreos entre las capitales de la ASEAN. Otro vértice que sumó Singapur fue el Acuerdo Multilateral sobre la Plena Liberalización de los Servicios Aéreos de Pasajeros (MAFLPAS) que fue firmado en noviembre de 2010. Este acuerdo y sus protocolos, permite servicios aéreos ilimitados de pasajeros entre las ciudades de la ASEAN. Estos tres acuerdos multilaterales proporcionan cielos abiertos dentro de la ASEAN para los estados miembros que los han ratificado.
Aeropuertos Singapur
En Singapur, los aeropuertos están bajo la propiedad y gestión de entidades gubernamentales. El principal aeropuerto del país es el Aeropuerto Changi, uno de los más importantes y ocupados del mundo. El Aeropuerto Changi es propiedad de la Autoridad de Aviación Civil de Singapur (CAAS, por sus siglas en inglés), una agencia del gobierno de Singapur. La gestión del aeropuerto está a cargo de Changi Airport Group (CAG), una empresa constituida en 2009. CAG se encarga de la operación y el desarrollo del Aeropuerto Changi y el Aeropuerto Seletar. A través de CAAS el gobierno mantiene un control significativo sobre la infraestructura aeronáutica, lo cual incluye al sistema de navegación aérea.
Ensayando una conclusión
- Singapur es una ciudad-estado. Las conexiones dentro de su país son irrelevantes.
- Singapur parece haber concebido al mundo como un todo con el cual conectarse para comerciar y/o favorecer el comercio.
- La apertura de sus cielos ha sido fundamental para el desarrollo de esta nación.
- Su ubicación estratégica está en el Asía-Pacífico, el área comercial más dinámica del mundo en los últimos años.
- El Estado tiene una participación importante en la infraestructura aeronáutica (y logística en general).
- Aunque la corrupción en el gobierno de la ciudad-estado es baja, el Índice de Percepción de la Corrupción que publica la Organización para la transparencia Internacional muestra que la nación ha logrado 83 puntos, lo que indica que la percepción de la población la ha degradado al 5º lugar entre los países considerados. Dicho de otro modo, el gobierno de Singapur está entre los más honrados pero en descenso ante la opinión pública.
- El sector privado es considerado el motor de toda la economía del país.
- Singapur ha estado y está desde hace tiempo entre los primeros lugares del ranking “Doing Business”, lo cual es una contundente muestra de su apertura, desregulación y seguridad jurídica.
- Singapur es la economía número 34 por volumen de PBI.
- Una nota de alarma es su deuda pública que en 2022 fue de 744.350 millones de euros, con una deuda del 141,11 % del PBI está entre los países con más deuda respecto al PBI del mundo. En términos per cápita, es de las más altas del mundo.
Surge de todo lo anterior que el modelo singapurense, aunque inspirador desde la perspectiva de los beneficios de la apertura y desregulación, no es completamente asequible o trasplantable a una nación con las características y morfología de la Argentina. Además, con foco específico en la aviación, aspirar a un modelo similar demanda realizar muchas transformaciones orientadas al libre mercado que llevará tiempo implementar.
Como norte al cual orientarse Singapur es un modelo con sus pro y contras. Sin lugar a dudas la desregulación, apertura y orientación a la libertad de mercado es la respuesta correcta a décadas de involución nacional, pero la evaluación realista de la situación de la Aviación Civil Argentina merece un diseño específico en vez de adhesiones a modelos lejanos y sui generis.