El grupo industrial Bombardier, que fabricó durante décadas los más diversos medios de locomoción, parece decidió concentrarse en la producción de aviones ejecutivos y eventualmente otros productos aeronáuticos que no impliquen volver al difícil mercado de las aeronaves de transporte aerocomercial.
Hasta hace unos días, todo parecía indicar que la empresa se dedicaría a pleno al negocio industrial ferroviario dejando de lado la aviación pero, según lo confirmó el presidente y director ejecutivo de la compañía, Alain Bellemare, hará lo contrario, venderá su participación en el negocio de fabricación de trenes al grupo francés Alstom S.A. para fabricar aviones ejecutivos.
«Es un acuerdo transformador para Bombardier dado que marca el final de nuestra transformación y el comienzo de un capítulo nuevo y brillante para la empresa», aseguró el ejecutivo.
Como informó recientemente Aeromarket, Bombardier tiene un pasivo de más de 9 mil millones de dólares que amenazaba su continuidad. Con la venta de su participación en Airbus Canada Limited Partnership a Airbus por 591 millones dólares, anunciada la semana pasada, y la transacción por su unidad de negocios de trenes, que dejan a la canadiense sumar entre 4.5 y 5 mil millones de ingresos netos, se alivia su deuda y logra margen para reorientar sus negocios.
No se puede confirmar si las conversaciones con Textron Aviation con el objeto de vender el negocio de aviación ejecutiva sucedieron o no en medio de las negociaciones de Bombardier con Alstom S.A., en todo caso lo que queda definido ahora es que la decisión de la empresa canadiense es enfocarse en el mercado de aviación ejecutiva.
“En el futuro, nuestro capital, energía y recursos estarán concentrados en acelerar el crecimiento e impulsar la expansión en la producción de aviones ejecutivos donde somos líderes de un mercado de $ 7 mil millones. Con un balance más sólido después de la finalización de esta transacción, un menú de productos líder en la industria, una sólida cartera de pedidos y un negocio de posventa en rápido crecimiento, competiremos desde una posición de fortaleza «, afirmó Bellemare al confirmar las decisiones de Bombardier.
Evidentemente, el fabricante de aeronaves observa que el mercado de aviones ejecutivos presenta un potencial de crecimiento y considera que su experiencia en la producción de ese tipo de aeronaves la coloca en una posición privilegiada. Con aviones como el Global 7500 –la aeronave de mayor porte y alcance de su segmento–, sumado a opciones como el Global 6500 y 5500; los Challenger, 350 y 650, y el Learjet 75, la compañía tiene con qué atraer clientes para estabilizarse y crecer.