Según información aparecida en tiempopatagonico.com, ya se tienen algunos datos de los registros del medidor de partículas que la Fundación de Investigaciones Aeroespaciales instaló en el aeropuerto de Bariloche, entre el 5 y 19 de noviembre pasado.
Según los expertos el valor de 150 microgramos por metro cúbico es un primer escalón que marca ciertos riesgos para la salud, en el caso de mantenerse esa relación por un período de 8 horas se deberían tomar recaudos (barbijos y cuidar la exposición) por los daños que podría causar. Por encima de los 150 microgramos por metro cúbico, la necesidad de protección es ineludible.
La gráfica que elaboró el medidor permite observar que el 12 de noviembre se alcanzó un valor total de 5000 microgramos por metro cúbico, lo cual eleva el valor 33 veces por sobre lo aceptable para el ser humano. Entre el 16 y 17 de noviembre, los registros indican que todo el tiempo se superaron los 150 microgramos por metro cúbico.
Para la aviación, se establecen dos valores referenciales: Menos de 2000 microgramos por metro cúbico permiten volar sin necesidad de realizar una inspección especial a la aeronave. Si ese valor se supera y hasta los 4000 microgramos, se hace necesario realizar una inspección y el mantenimiento sugerido por cada fabricante; por encima del los 4000 microgramos, se debe impedir el vuelo.
Evidentemente se debe pensar en contar con este equipamiento en lugares estratégicos para que las autoridades aeronáuticas tomen las decisiones de seguridad pertinentes avalados por la evidencia técnica adecuada.