Como sabe todo el ecosistema aeronáutico, la última auditoría de la OACI desnudó la calidad de los servicios de navegación aérea argentinos que brinda la Empresa Argentina de Navegación Aérea Sociedad del Estado (EANA), dependiente del Ministerio de Transporte de la Nación, mal que le pese admitirlo a su presidente y gerente general, la abogada Gabriela Logatto (y sus adláteres los comandantes de Aerolíneas Argentinas Matías Miller y Rodrigo Devesa) quien, es bueno recordarlo, antes de llegar a ese puesto fue, durante años, directora de inspecciones de navegación aérea en el ENTE (ANAC). Todo un dato, sobre todo porque ahora Logatto deslinda responsabilidades en el ENTE (ANAC) en general y su titular en particular. Internas eternas.
Dicho lo anterior, nos hemos abocado al análisis de un aspecto extremadamente serio a la hora de poder evaluar la calidad de la prestación de los servicios de navegación aérea: Las AIRPROXs (pérdida de separación entre aeronaves en vuelo). De esta forma podremos darles la oportunidad a nuestros lectores de contar con una información que parece perderse entre bambalinas, por eso hallar datos no fue fácil, por lo que debimos trabajar sobre las redes sociales y la web oficial de la Junta de Seguridad en el Transporte (JST), donde se supone que se muestran todos los incidentes que investigan según el medio de transporte aéreo/terrestre/marítimo. Demás esta decir que todas las AIRPROX son de notificación obligatoria por lo que el organismo debió intervenir en cada una de ellas.
El análisis permite hallar –no sin un complejo trabajo de recuento y entrecruzamiento de información– 67 sucesos investigados en el año 2022, sin que se pueda descartar la existencia de varios más. Esto significaría que existió al menos una pérdida de separación de aeronaves en vuelo (AIRPROX) cada 7 días. Lamentablemente no se pudo hallar, cuántos de estos incidentes investigados fueron sólo un alerta de tránsito (TA) –señal que reciben los aviadores en el cockpit– ni cuántas terminaron con indicación de resoluciones de anticolisión (RA), lo cual despierta suspicacias ante su potencial omisión.
Para la investigación que se presenta, ARMKT consultó a EANA sobre la cantidad oficial de alertas de tránsito y resoluciones de anticolisión, reconociéndose sólo 3 resoluciones de anticolisión (TCAS RA) en todo el 2022. En cuanto a las AIRPROX (alerta de tránsito), sólo se limitaron a señalar que: “Ese es otro número”. Expresión que obliga a preguntarse si la actual gestión no banaliza la gravedad de las mismas.
Observemos el video que precede, el cual fue tomado de uno de los screen de datos radar del Centro de Control de Área EZEIZA (ACC EZE), que muestra la forma en que se ve una AIRPROX desde el Control de Tránsito Aéreo. La operación de las aeronaves es real pero tanto la alarma sonora como el cambio de color de las etiquetas no responden a una AIRPROX real, sino que son una falla del sistema –que posee 15 años de antigüedad– con el que EANA presta los servicios. Aquí resulta imposible soslayar que tales situaciones se reiteran de manera cotidiana y son parte del ambiente natural de trabajo de los controladores aéreos. Resulta increíble que ese mismo sistema permanezca desde 2007 sin mejoras reales (inversiones), y que la actual conducción de EANA pretenda llevar a cabo un rediseño del espacio aéreo más congestionado del país (TMA BAIRES).
Análisis situacional
El número de incidentes al cual accedimos DEBE PREOCUPAR porque no sólo deja más que en evidencia la calidad de los servicios que se prestan y quiénes fueron los responsables directos de los resultados de la auditoria OACI. Demás está decir que es inadmisible que un país como la Argentina tenga ese nivel de seguridad en sus operaciones aéreas. Sin embargo, el número se vuelve escandaloso si se contextualiza que en 2022 nuestro país tuvo un 25 % menos de operaciones aéreas que en 2019. Por supuesto que tal contextualización nos lleva a una pregunta: ¿Qué sucederá con la cantidad de AIRPROX de elevarse la cantidad de operaciones aéreas en el corto plazo? Está claro que el mismo crecerá exponencialmente volviendo más inseguros los cielos argentinos. Sin embargo, a juicio de la conducción de EANA inversiones como las oficinas de la Torre Bouchard, cursos de género y otras sandeces eran más importantes que actualizar el sistema o adquirir radares de aproximación.
el # en PADAS significa que la FBZ no sigue la ruta del Plan de Vuelo, parece una alerta de colisiones posibles debido a violaciones del espacio aéreo.
Están separadas por 1000ft es un error del sistema, al estar al limite de fir entre Arg y URU !
Cuando las alarmas suenan y te acostumbras a trabajar asi, aunque no representen peligro, vas perdiendo capacidad de reaccion y les restas importancias. Nos sucedio con LAPA, que todas esas vidas que se perdieron, sirvan para algo…