La semana pasada, un grupo de empresas, centros de estudio y agencias gubernamentales dieron un gran paso hacia la próxima generación de viajes aéreos. La cooperación entre entidades se concretó en el diseño y ejecución de una prueba de vuelo exitosa, en la que se integraron tecnologías emergentes de movilidad aérea avanzada (AAM), como la automatización del futuro sistema del espacio aéreo, la infraestructura de comunicaciones, y una aeronave de despegue y aterrizaje vertical que operó en una ruta aérea entre el Centro de Pruebas de Vuelo AllianceTexas de Hillwood, en Justin, y el Discovery Park de la University of North Texas (UNT).
La prueba de vuelo no sólo simuló una posible ruta de alta demanda para transportes aéreos de carga y pasajeros autónomos, sino que también proporcionó datos fundamentales para el diseño de los estándares que deberá tener la industria en la gestión del espacio aéreo y la infraestructura de comunicaciones en las operaciones de una aeronave en vuelo autónomo.
El equipo de North Texas amplió la investigación anterior dirigida por la NASA, al incluir la integración de datos meteorológicos CityWarn de CASA (Adaptive Sensing of the Atmosphere, por su sigla en inglés), que pertenece a un consorcio con sede en UMass Amherst, y se instaló en la Universidad del Norte de Texas en Denton, y un hardware complejo que aporta soluciones de software necesaria para la operación de la próxima generación de viajes aéreos.
Para que las rutas de alta demanda funcionen, los eVTOL tendrán que estar en constante contacto con un sistema de gestión del tránsito aéreo, como lo estuvo el vehículo de prueba durante la prueba de la semana pasada. Esto no es sólo para organizar el tránsito aéreo, sino también para garantizar la seguridad de las aeronaves, las personas y las propiedades que se encuentran debajo.
El equipo de investigación de North Texas estuvo integrado por, un grupo de 15 entidades, incluidos representantes de la Universidad de North Texas (UNT), Bell Textron, Unmanned Experts Inc., AAMTEX, que trabajó con la NASA, en distrito de Hillwood y la Administración Federal de Aviación Civil (FAA) que monitoreaba la próxima generación. En pocas palabras: una unión de entidades trabajando mancomunadamente.
La aeronave que simuló el vehículo demostrador autónomo, fue un helicóptero Bell 407GXi, suministrado por Bell Textron como eVTOL sustituto, fue el vehículo que completó el vuelo a lo largo de una ruta de alta demanda establecida por la NASA. El Bell voló y suministró datos aéreos reales a un sistema de gestión de tránsito conocido como PSU, que monitoreó toda la operación desde tierra.
Aprovechando el AllianceTexas Flight Test Center (FTC), de Hillwood, (también conocido como “The MIZ” por Mobility Innovation Zone), adyacente al Texas Motor Speedway, la prueba aprovechó la experiencia anterior con vehículos aéreos no tripulados UAV y AAM realizados durante el último año.
Cabe destacar que la FTC se ha convertido en el destino de la industria de sistemas autónomos y UAV para realizar las pruebas más exigentes y explorar los avances de las tecnologías de próxima generación, incluidos los exitosos ensayos que suelen realizar Bell, Wing y otras compañías de robótica terrestre y aérea.
“Hillwood se enorgullece de que AllianceTexas Mobility Innovation Zone esté sirviendo como plataforma catalizadora para el futuro de los vehículos aéreos no tripulados y sus sistemas de tránsito relacionados”, dijo Christopher Ash, vicepresidente senior de Desarrollo de Negocios de Aviación de Hillwood y Alliance Aviation Services. “El norte de Texas continúa a la vanguardia del futuro del vuelo y esta asociación, organizada por la Campaña Nacional AAM, de la NASA, e iniciada por la Universidad del Norte de Texas y Unmanned Experts, Inc., muestra la profundidad de los activos regionales y los recursos corporativos que han permitido que MIZ se convierta en un punto focal global en la revolución tecnológica que ocurre dentro de la movilidad aérea”, agregó Ash.
Otros socios involucrados en la investigación incluyen Avianco; Sistemas Delmont; ResilienX, Metron; Soluciones de movilidad aérea autónoma de Hermes; AAMTEX, Frequentis; Centro de Excelencia e Innovación Lone Star UAS; y el programa CASA, de la Universidad de Massachusetts, Amherst.
La UNT colaboró a través de su Centro de Sistemas Integrados de Movilidad Inteligente (CIIMS, por su sigla en ingles). El CIIMS se estableció en 2020 para reunir la experiencia en todas las disciplinas, incluidas la ingeniería y los negocios, en torno a la movilidad inteligente, que incluye vuelo autónomo, vehículos terrestres y los sistemas que permitirán su implementación.
La Zona de Innovación de Movilidad de AllianceTexas (MIZ) es un ecosistema único basado en la colaboración y la oportunidad. Esa combinación funciona para conectar personas, lugares e ideas que impulsan la innovación en la movilidad terrestre y aérea. Al aprovechar su infraestructura única, MIZ ofrece a los visionarios de la movilidad acceso completo a un entorno sin precedentes en el que convergen recursos y asociaciones que son esenciales para escalar de manera integral las últimas tecnologías y llevarlas a su viabilidad comercial.
AllianceTexas en sí misma es una historia de éxito regional incomparable gracias a sus casi 11.000 ha. Esta iniciativa ya ha contribuido a la economía del norte de Texas al conectar industrias globales. El AllianceTexas de Hillwood, además tiene la ventaja de estar conectado con el primer aeropuerto industrial del mundo, Perot Field Fort Worth Alliance Airport (nombrado así por el legendario empresario y político Ross Perot), que alberga uno de los principales centros intermodales del país. AllianceTexas también cobija a más de 533 empresas que han construido más de 4.923.861.12 m2 y creado más de 62.000 puestos de trabajo.
Los socios en la prueba
Además de Bell, la UNT y otras agencias, la prueba contó con nuevas empresas tecnológicas que están a la vanguardia en el respaldo de la cuarta revolución industrial en general y la aviación en particular.
Metron Aviación, inc.
Esta empresa proporcionó el servicio Demand Capacity Balancing (DCB) para respaldar la demostración de vuelo. El servicio DCB monitorea la demanda y la capacidad en los recursos de la UAM –por ejemplo vertipuertos– y proporciona el primer frente para la superación de obstáculos estratégicos al identificar los desequilibrios entre la demanda y la capacidad para ayudar a los operadores y proveedores de servicios UAM (PSU) al planificar sus operaciones.
ResilienX
La compañía ResilienX, proporcionó su plataforma de software de garantía de seguridad FRAIHMWORK que proporciona una plataforma para servicios, capacidades y funciones que garantizan la seguridad operacional en todo el sistema ISSA (In-time system-wide safety assurance) de gestión de seguridad operacional de la aviación. ResilienX ha trabajado con la NASA en estos conceptos durante años y ha desarrollado una presentación conjunta con el grupo de seguridad de todo el sistema de la NASA para capacitar a la comunidad de aviación sobre ISSA e IASMS.
Avianco Technologies Inc.
Avianco es un proveedor de tecnología de software con sede en el norte de Texas que brinda soluciones integrales de conocimiento del espacio aéreo, operaciones de vuelo y gestión del tránsito para operaciones no tripuladas. Avianco ha desarrollado el software SkyNet PSU (Proveedor de servicios para la movilidad aérea urbana) como parte de su participación en el proyecto de simulaciones del espacio aéreo AAM X4 de la NASA. El software SkyNet PSU se utilizó para las pruebas de vuelo.
Frequentis
Esta empresa tecnológia con base en Austria, desempeñó un papel fundamental en el proyecto al implementar su plataforma MosaiX SWIM, que facilitó el intercambio de información del espacio aéreo entre los socios de UNT y la NASA.
Hermes
Las soluciones de movilidad aérea autónoma de Hermes proporcionaron el centro de intercambio de datos entre todo el ecosistema utilizado.