La NASA, junto a un grupo de organizaciones asociadas, probaron recientemente un sistema de guía de aeronaves que podría ayudar a los aviones a mantener un rumbo preciso incluso mientras vuelan a altas velocidades de hasta 500 kts. El instrumento se denomina “Soxnav”, y es la culminación de más de 30 años de desarrollo de sistemas de navegación para aeronaves que son utilizadas para investigar la superficie y “secretos” de nuestro planeta.
La primera misión para probar este sistema de monitoreo terrestre desde el Centro de Investigación de Vuelo Armstrong de la NASA en Edwards, California, en diciembre pasado, se realizó con un avión Gulfstream IV (G-IV) de la NASA. El equipo de abordo estuvo integrado por varios ingenieros del Centro Armstrong, el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en el sur de California y el Instituto de Investigación Ambiental del Área de la Bahía (BAERI), en Silicon Valley, California.
“El objetivo (del programa) es demostrar que este nuevo sistema puede mantener una aeronave de alta velocidad con una desviación mínima de su ruta hacia el destino y mantenerla allí más del 90 % del tiempo”, dijo John Sonntag, consultor independiente de BAERI y codesarrollador de Soxnav.
En materia de navegación, la guía de dirección automatizada en 3D, Soxnav, brinda a los pilotos una gran ayuda de aproximación de precisión para aterrizar en condiciones de poca visibilidad.
“El G-IV está equipado actualmente con un sistema de piloto automático estándar”, dijo Joe Piotrowski Jr., ingeniero de operaciones del G-IV. “Pero Soxnav podrá crear el vuelo nivelado exacto requerido para el éxito de la misión del radar de apertura sintética aerotransportado de próxima generación (AirSAR-NG)”.
Gracias al guiado por Soxnav, el G-IV es capaz de proporcionar información científica sobre la Tierra de una manera más eficiente. Por ejemplo, la herramienta de navegación optimiza las observaciones de AirSAR-NG, un instrumento que utiliza tres radares simultáneamente para observar cambios sutiles en la superficie de la Tierra. Junto con el sistema Soxnav, estos tres radares proporcionan datos mejorados y más precisos sobre la Tierra.
“Con los datos que se pueden recopilar de los vuelos científicos equipados con el instrumento Soxnav, la NASA puede proporcionar al público en general un mejor apoyo para los desastres naturales, el seguimiento de los suministros de alimentos y agua, así como datos generales de la Tierra sobre cómo está cambiando el medio ambiente”, dijo Piotrowski, al referirse a las aplicaciones del sistema.
En última instancia, este económico sistema de guía de vuelo está destinado a ser utilizado por una variedad de aeronaves y dar soporte a gran cantidad de sensores aéreos presentes y futuros. “El sistema Soxnav es importante para todas las plataformas de ciencia aerotransportada de la NASA”, dijo Fran Becker, gerente de proyecto para el proyecto G-IV AirSAR-NG de la NASA (Armstrong). “La intención es que el sistema sea utilizado por cualquier plataforma científica aerotransportada para que satisfaga los objetivos de cada misión en materia de recopilación de datos”.
En combinación con los demás instrumentos que equipan la flota de aeronaves científicas aerotransportadas, Soxnav facilita la generación de datos científicos más abundantes y de mayor calidad sobre el planeta. Dado que los fenómenos meteorológicos extremos se están volviendo cada vez más comunes, los datos científicos de calidad sobre el planeta pueden mejorar nuestra comprensión de nuestro mundo para abordar los desafíos que enfrentamos hoy y prepararnos para futuros fenómenos meteorológicos.
“Soxnav permite una mejor recopilación de datos para usarlos con el objetivo de proteger y mejorar las vidas de las generaciones futuras”, dijo Sonntag.
Esta tecnología podría utilizarse para fines como la navegación rutinaria de las aeronaves. Pero sobre eso el artículo sugiere la posibilidad sin dar mayores precisiones.