Los servicios de tránsito aéreo estarían evolucionando gracias a la tecnología y pronto las enormes torres de control podrían llegar a ser obsoletas. Al menos eso se desprende de una información que llega de Suecia, país que estaría ensayando, en Ornskoldsvik, la posibilidad de eliminar la torre de control tradicional.
Hace un tiempo Airbus informó que la cabina de los pilotos podría estar ubicada en cualquier parte del avión ya que la tecnología permite que los pilotos comanden la aeronave con toda seguridad gracias al apoyo de cámaras ubicadas al frente de las mismas. Ahora, una tecnología similar se estaría usando para que los aviones que aterricen o despeguen sean guiados por controladores de tránsito que están a cientos de kilómetros de distancia.
Ornskoldsvik sería el primer aeropuerto del mundo en implementar un sistema remoto de control. Se trataría de una prueba piloto que revolucionaría los servicios de tránsito. La implementación de esta experiencia irá extendiéndose desde los lugares más inhóspitos hasta llegar a los más importantes aeropuertos del mundo.
Las compañías que construyen estos sistemas remotos sostienen que su tecnología es más barata y mejor que las torres tradicionales. “Contiene mucha tecnología de cámaras de precisión que pueden hacer lo que el ojo humano no podría”, asegura Pat Urbanek, de Searidge Technologies.
Las ventajas son muchas. En primer lugar se eliminarían puntos ciegos y se incrementarían las posibilidades de ver detalles que hasta ahora no se podían observar. Incluso, gracias a la tecnología infrarroja, las cámaras brindarían imágenes que en situaciones de reducida visibilidad como niebla, nieve o lluvia no se tenían.
El aeropuerto de Ornskoldsvik es vital para los residentes de esa localidad que quieren viajar a Estocolmo y el resto del mundo. Pero con solo 80.000 pasajeros anuales, no justifica el costo de personal de control de tiempo completo, que representaría unos 175.000 dólares anuales en salario, prestaciones e impuestos para cada uno de seis controladores.
De alguna manera los argentinos hemos sido pioneros en esta materia ya que en el Aeropuerto Internacional de San Fernando, una cámara complementa la visión de los controladores que, luego de las últimas obras no alcanzarían a ver todo lo que deberían.
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