Un equipo integrado por dos ingenieros y un desarrollador, está entre los tres finalistas preseleccionados para ganar el Premio Deutscher Zukunftspreis 2023 (Premio del Presidente Federal de Alemania a la Tecnología e Innovación) por el desarrollo de una tecnología que captura CO2 directamente del aire con el objetivo de eliminarlo de la atmósfera. El premio, es otorgado por el Presidente de Alemania en reconocimiento a la excelencia científica, reconociendo su potencial aplicación en beneficio de la humanidad.
El proceso de captura directa de aire (DAC, por su sigla en inglés) extrae dióxido de carbono (CO2) directamente del ambiente para almacenarlo o reutilizarlo con fines industriales. La tecnología DAC es una de varias iniciativas complementarias que Airbus está adoptando en sus esfuerzos por descarbonizar y reducir las emisiones de CO2 en la industria de la aviación.
“Me gustaría felicitar al equipo (integrado) Antje Bulmann, Viktor Fetter y Tobias Horn. El logro del trío en la producción de los módulos DAC es un ejemplo perfecto de cómo las tecnologías de la industria espacial pueden perfeccionarse para su uso en la Tierra y ayudar a reducir las emisiones de CO2”, afirmó la Dra. Sabine Klauke, directora técnica de Airbus.
Los módulos DAC del equipo de Airbus son una adaptación de una tecnología de adsorción que se utiliza en la Estación Espacial Internacional (ISS), donde es necesaria para eliminar de manera confiable el CO2 exhalado por los astronautas de la atmósfera a bordo. Estos nuevos módulos DAC ahora realizan la misma tarea aquí en la Tierra. El CO2 se extrae del aire mediante un proceso de absorción DAC. Para lograrlo, Airbus ha cooperado en el desarrollo de una resina de amina que captura eficientemente CO2 incluso en bajas concentraciones. Primero, un ventilador aspira aire, que fluye a través de un filtro de amina sólida que une selectivamente el CO2. El aire procesado que luego se libera, prácticamente no contiene CO2. Esta fase dura hasta que la resina se satura con el gas. La segunda etapa consiste en calentar el filtro, regenerarlo para liberar una corriente concentrada de CO2, que puede reutilizarse o secuestrarse para, por ejemplo, almacenarse bajo tierra.