El pasado viernes 13 de agosto, Embraer dio otro paso en el camino hacia un futuro de propulsión eléctrica. En esta nueva etapa, la empresa comenzó en Gavião Peixoto, San Pablo, Brasil, una campaña de pruebas de vuelo con su avión demostrador eléctrico, un legendario IPANEMA.
El objetivo de esta serie de pruebas es evaluar nuevas tecnologías y soluciones que permitan una propulsión 100% eléctrica para aeronaves.
La estrategia de innovación abierta ha acelerado el desarrollo de las tecnologías necesarias para aumentar la eficiencia energética de las futuras aeronaves mediante el uso e integración de dispositivos eléctricos en un sistema de propulsión innovador.
“La potencia, el rendimiento, el control, la gestión térmica y la seguridad operativa fueron las características principales evaluadas en estos primeros vuelos tripulados”, dice el comunicado de Embraer. “El objetivo es demostrar condiciones de vuelo reales a través de resultados obtenidos en simulaciones computacionales, pruebas de laboratorio e integración de tecnología en tierra, que han tenido lugar desde la segunda mitad de 2019”, agrega el despacho de prensa.
“El primer vuelo de una aeronave es siempre un hito importante, y el despegue de nuestro primer avión eléctrico de cero emisiones también es resultado de la contribución relevante de nuestros equipos y socios a la transición energética del sector”, dijo Luis Carlos Affonso, Vicepresidente de Ingeniería, Desarrollo Tecnológico y Estrategia Corporativa de Embraer. “Estamos comprometidos a buscar soluciones que permitan el futuro de una aviación más sostenible y la innovación jugará un papel clave en este viaje”.
En el proyecto se utilizó un sistema de propulsión eléctrica de WEG y un conjunto de baterías desarrolladas y financiadas por EDP que se integraron en un EMB-203 Ipanema, un avión histórico para Embraer, que ya en 2004, se había convertido en la primera aeronave fabricada en serie del mundo, que fue certificado para volar con combustible de fuente renovable (etanol).
Embraer también trabaja en otras tecnologías, entre ellas la aplicada a una aeronave eVTOL (vehículo eléctrico de aterrizaje y despegue vertical), conocido como EVA (Electric Vertical Aircraft o avión eléctrico vertical), que desarrolla Eve, la empresa de Movilidad Aérea Urbana de Embraer.
En este programa, Embraer coopera científica y tecnológicamente con dos reconocidos proveedores industriales, WEG y EDP, que comparten su visión sobre las futuras soluciones de movilidad eléctrica. WEG es una empresa brasileña de alta tecnología que ha ganado un lugar como referente mundial de maquinaria eléctricas, mientras que EDP es líder global en energía eléctrica con una presencia de 20 años en Brasil.