El primer vuelo experimental del Heart X1, que se convertirá en el avión totalmente eléctrico más grande jamás volado, se retrasará para el año que viene.
El ES30 es un avión regional eléctrico de Heart Aerospace, que ha sido diseñado para ser propulsado por un sistema híbrido-eléctrico que podrá transportar hasta 30 pasajeros.
Con una autonomía totalmente eléctrica y cero emisiones, el avión podría tener un alcance de 200 kilómetros y una autonomía híbrida extendida a 400 kilómetros, lo que convierte al ES-30 en una aeronave sostenible y eficiente para volar rutas de corta distancia. El vuelo experimental inicial del demostrador Heart X1 está diseñado para validar las capacidades de la innovadora tecnología de propulsión eléctrica de Heart.
Las pruebas se pensaron para este año, pero han surgido inconvenientes que llevaron a que se postergaran. El Aeropuerto Internacional de Plattsburgh sería el escenario elegido para el primer vuelo; la selección fue realizada por su ubicación en el Valle de Champlain, un centro emergente para el transporte de vanguardia, que cuenta con una amplia infraestructura aeroportuaria, baja densidad de tránsito aéreo y un sólido apoyo comunitario a las iniciativas tecnológicas de transporte.
El avión Heart X1 está siendo sometido actualmente a pruebas exhaustivas de sistemas críticos para garantizar un vuelo seguro y exitoso en Plattsburgh el próximo año, y Heart Aerospace planea traerlo a Plattsburgh International a principios de 2025.
El avión
La particularidad del diseño de Hear Aerospace está en la interacción entre el ala y la góndola (el alojamiento del motor montado en el ala); desempeña un papel crucial en el rendimiento aerodinámico del avión. Con ángulos de ataque elevados, los diseños tradicionales de góndola pueden provocar la separación del flujo de aire, lo que provoca pérdida de sustentación. El diseño de Heart minimiza la interferencia aerodinámica entre la góndola y el ala, lo que permite un mayor ángulo de ataque y retrasa la entrada en pérdida. Esto mejora la generación de sustentación durante las fases de crucero y aterrizaje, lo que permite al ES-30 volar a velocidades más bajas con mayor eficiencia aerodinámica.
“El funcionamiento de los aviones eléctricos requiere diseños aerodinámicos de alta eficiencia, y nuestra investigación sobre la integración de la propulsión centrada en el ala ha dado lugar a un concepto que supera significativamente a los diseños convencionales”, afirma Alain Cuenca, ingeniero sénior de aerodinámica y termodinámica en Heart Aerospace. “Innovaciones como esta son clave para hacer realidad la aviación eléctrica”.

