El gigante aeroespacial Boeing acordó con Thoma Bravo la venta por 10.550 millones de dólares de una parte de su negocio Digital Aviation Solutions, que incluye activos de Jeppesen, ForeFlight, AerData y OzRunways.
Conforme al acuerdo, Boeing conservará capacidades digitales esenciales para aprovechar la provisión y manejo de datos específicos de las aeronaves y flotas, con el objeto de continuar brindando a los clientes comerciales y de defensa servicios de mantenimiento, diagnóstico, reparación y, sobre todo, información predictiva para la toma oportuna de decisiones.
Según Kelly Ortberg, presidente y director ejecutivo de Boeing, la venta de esta unidad de negocios está alineada con la estrategia de enfocar a la compañía en sus principales negocios para “complementar el balance general y priorizar la calificación crediticia de grado de inversión», que es necesaria para que la compañía haga frente a sus compromisos y desafíos futuros.
Por su parte, la empresa tecnológica Thoma Bravo adquiere activos que considera muy valiosos para su futuro. Al menos eso fue lo que expresó Holden Spaht, socio de la compañía: «Con una trayectoria que se remonta a la década de 1930, Jeppesen ha estado a la vanguardia de la innovación tecnológica durante casi un siglo, por lo que nos entusiasma aprovechar esta trayectoria e impulsar la próxima fase de crecimiento».
Thoma Bravo, una empresa con más de 40 años de experiencia, es uno de los mayores inversores en software del mundo, que tiene un valor de mercado de 179 000 millones de dólares, según los números oficiales al 31 de diciembre de 2024. Una de las características de esta empresa es que invierte constantemente en innovación y compañías que operan en los sectores del software y la tecnología, lo cual se ha plasmado en la inversión que ha realizado en más de 520 compañías en los últimos tiempos.
Aproximadamente 3.900 empleados de todo el mundo trabajan en la división de Soluciones de Aviación Digital de Boeing. En los próximos meses, Boeing trabajará con Thoma Bravo para garantizar una transición lo más fluida posible para los empleados, a la vez que continuará satisfaciendo las necesidades de los clientes de acuerdo con las obligaciones adquiridas.
Se espera que la transacción se cierre a finales del año en curso, aunque está sujeta a la aprobación regulatoria y a las condiciones de cierre habituales.
