El último modelo de la familia 787 ha comenzado a ensamblarse en la planta de Boeing en North Charleston, Carolina del Sur, EE.UU. El equipo empezó a trabajar en la unión de los componentes del 787-9, el 22 de noviembre, según lo programado, lo que supone un hito para el equipo de la planta de Carolina del Sur y constituye otra señal de la estabilidad del programa.
“Nuestro equipo está bien preparado e impaciente por comenzar el ensamblaje del 787-9 Dreamliner”, declaró Jack Jones, vicepresidente y director general de Boeing Carolina del Sur. “Haber conseguido este importante hito en las operaciones de ensamblaje final demuestra que estamos haciendo un buen trabajo en Boeing Carolina del Sur. Nos enorgullece poder entregar nuestro primer 787-9 fabricado en la planta a United Airlines, así como hacer entrega de los 787-9 y 787-8 a todos nuestros clientes”, agregó Jones.
La planta de North Charleston (Carolina del Sur) se une ahora a la de Everett (Washington), que comenzó con la producción del 787-9 en mayo de 2013. El primer 787-9 fabricado en Carolina del Sur se entregará a la compañía United Airlines.
El 787-9 complementa y amplía la familia del 787 y ofrece a las aerolíneas la capacidad necesaria para poder extender las rutas que iniciaron con el 787-8. Con un fuselaje 6 metros más largo, el 787-9 permitirá aumentar hasta en 40 el número de pasajeros, con una autonomía adicional de 830 kilómetros, todo ello sin comprometer su excelente desempeño medioambiental: un 20 por ciento menos en consumo de combustible y en emisiones.
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