Surcando los aires del fin del mundo

Visitando HELI USHUAIA • Por Luis Alberto Franco

Izquierda Edelio O. Mella, derecha Luis A. Franco.

Edelio Osvaldo Mella y Roberto Valdés comenzaron a madurar una idea allá por 2006. Enamorados de Tierra del Fuego y la aviación, estos dos pioneros del turismo aeronáutico conciliaron su vocación para, con esfuerzo y visión, desarrollar una actividad que se ha incorporado al mercado turístico de la Patagonia Austral. Ellos no sólo llevaron adelante un proyecto exitoso, sino que son una presencia concreta camino a la Antártida y su potencial. Además, hoy son una fuente de trabajo para pilotos en pleno crecimiento.

AEROMARKET estuvo en Ushuaia y pudo conversar –y volar– con Edelio, he aquí una parte pequeña de la historia de HELI Ushuaia.

 

ARMK: — ¿Cómo surge la idea de brindar servicios aéreos turísticos en este bellísimo rincón de la Patagonia Austral?

Edelio O. Mella — Hace unos 40 años que vuelo por esta zona, vine de paseo y me quedé a vivir. Creo que desde que vine me vinculé al aeroclub. Con el tiempo compré un avión, en un principio la idea era hacer vuelos por la Patagonia con un Cessna 182, tal como se hacen en otros lados. Junto con Roberto (Valdés) estábamos con ese proyecto cuando vimos un simulador de Cicaré en un festival que hubo en Puerto Madryn. Realmente me encantó ese aparato.

Edelio Mella nos lleva a la Laguna Esmeralda. Foto: Aeromarket.

Fue a partir de esa experiencia que quisimos incorporar el simulador a los festivales que hacíamos en el Aeroclub Ushuaia. Desde el 2000 hacíamos shows a los que incorporábamos cosas nuevas todos los años, como globos aerostáticos, acrobacias, etcétera y nos pareció una buena idea traer el simulador para exhibirlo en uno de esos encuentros. Cuando fuimos a ver a la gente que tenía el simulador vimos los Robinson, y ellos nos llevaron a volar, lo cual fue una experiencia encantadora. Obviamente que conocía los Robinson, e incluso a Willie Tufró, pero me fascinó volar, se despertó un gran interés por su potencial para el proyecto patagónico que veníamos madurando, por lo que comenzamos a pensar en comprar un helicóptero. La oportunidad se presentó y adquirimos un R44. Willie nos ayudó mucho y lo trajimos acá. Si bien teníamos experiencia como pilotos de avión y habíamos hecho el curso de pilotos de helicóptero, el trasladar el R44 a Ushuaia no era algo para novatos, tanto fue así que Willie nos dice: “los voy a mandar con mi jefe de pilotos –el experimentado y cordial Romeo Volpi– porque no quiero que se maten en la Patagonia y me hagan mala publicidad (Edelio ríe) … el típico humor de Willie.  Ciertamente nos vino muy bien volar con Romeo porque seguimos aprendiendo mucho en ese vuelo y luego al volar por aquí en la montaña. Fue una gran idea que nos acompañara”.

 

— ¿Ustedes tenían experiencia de vuelo en montaña?

— Sí, mucha, los dos éramos pilotos comerciales de primera, instructores de vuelo, teníamos una experiencia bastante consolidada, pero este aparato era de alas rotativas, otra cosa.

 

— ¿Y cómo se fue consolidando el proyecto?

A los 15 días me llama Chicou (Sebastián), de Patagonia Chopper, para hacer un vuelo a Calafate, que está a casi 350 millas de nuestra ciudad. Tenían un cliente que quería hacer una serie de fotografías del glaciar Perito Moreno. Como te dije, no teníamos experiencia, pero contactamos a un piloto naval con mucho entrenamiento Carlos García Smith para que nos diera una mano y lo hizo con gran gusto, así que esa fue nuestra primera misión: ¡volar para un famosísimo fotógrafo chino que sacaba fotos cenitales! Eso fue en el 2007. Así, despacito y con cierta continuidad empezamos a trabajar, a tener consultas, lo que nos llevó a darnos cuenta que teníamos que ser pilotos comerciales de helicóptero, así que hicimos el curso entre el 2008 y 2010.

En el 2009 tuvimos una situación muy particular. En la plataforma del aeroclub fuimos a poner en marcha el helicóptero y no arrancó, había “palmado la batería”. Eso fue un aviso importante que nos llevó a una conclusión importantísima: los únicos que nos podíamos rescatar o sacar de una situación por cuestiones técnicas éramos nosotros mismos. Dado que el desafío nos apasionaba cada vez más, que habíamos rendido las licencias y habilitaciones, y sumado muchas horas por ir y venir a Buenos Aires con el helicóptero por los cursos, decidimos comprar un helicóptero nuevo. Con dos Robinson R44 ya teníamos más respaldo, pero también un pequeño monstruito al que había que darle de comer, así que no nos quedaba otra que crecer.

 

 

— Habían salido de la dimensión “proyecto” para ser una empresa …

— Sí, organizamos la parte comercial con oficinas en el centro de la ciudad y empezamos a desarrollar todo esto del turismo en helicóptero. Fue todo un proceso muy ameno. Como te dije, íbamos y veníamos a Baires con el Robinson, cuando me preguntaban cuánto tardábamos en ir y venir le decíamos “¡cinco asados!”. Lo que sucedía es que en los vuelos hacíamos escalas y como en la aviación de la Patagonia nos conocemos todos, al llegar con el helicóptero se daba algo especial que atraía y motivaba a la gente del ambiente de todos lados, el helicóptero entusiasma. Ante estas reacciones fue que en 2010 se nos ocurrió organizar el “Heliraid de la Patagonia”. Fue una travesía con 7 helicópteros desde Buenos Aires, una experiencia increíble, con una logística importante en la que, por ejemplo, YPF ubicó abastecimiento de combustible para las postas. Y ocurrió, que la llegada a Ushuaia coincidió con el arribo de la gran regata de “Velas Sudamericanas”, lo que permitió que los 7 helicópteros sobrevoláramos las fragatas y veleros. ¡Fue fantástico, todo sumaba y difundía nuestro sur, los deportes y el vuelo en helicóptero! 

 

 

Luego de aquella experiencia organizamos el “Heliraid de las Cuatro Naciones”, que además de Argentina, recorrió parte de Uruguay, Brasil y Paraguay, eso fue a finales de 2010. Esos raids trascendieron mucho.

 

— ¿Qué otro hito de esos tan sabrosos recordás?

— Hay muchos. Uno de 2012 es parte de nuestra corta pero rica historia. En aquellos comienzos nos llega un mail en el que unos interesados del exterior nos consultan si podíamos ir con un helicóptero a la Antártida. Les mandamos una foto del R44 en un barco y les contestamos “tenemos esto”. Ellos vendrían a la Antártida con un barco que transportaba 8 pasajeros y la tripulación, el crucero tenía su helicóptero Eurocopter B3 y dos mini submarinos, ¡Imaginate lo que era eso! Nos pidieron las características del helicóptero y les mandamos los datos del R44 nuevo que tenía muy pocas horas voladas. Luego pidieron los datos de los pilotos, se los enviamos, incluimos a Carlos García Smith que ya había volado en la Antártida. Nosotros pensábamos que con un helicóptero chico las posibilidades no eran muchas. Pero luego nos pidieron una cotización que nosotros hicimos cubriéndonos mucho y suponiendo que nos iban a decir que no, pero al rato contestaron que el precio estaba bien. Entonces les pedimos el dinero por adelantado, y solicitaron el número de cuenta para hacer la transferencia y depositaron. Así que cuando llegó el barco tuvimos que cargar el R44 y nos fuimos a la Antártida donde volamos por 45 días. Roberto Valdés hizo la segunda etapa, luego de Carlos. Esta experiencia fue tremendamente positiva desde donde se la mire. Aprendimos sobre meteorología antártica, que es menos cambiante que la de Ushuaia, y otras cosas importantes que hoy son parte del know-how que nos ha permitido crecer y pensar en el futuro.

El Robinson 44 de HELI USHUAIA volando hacia la Laguna Esmeralda. Foto: HELI USHUAIA.

 

— ¿Cómo está equipada la empresa hoy?

— Hoy tenemos dos Robinson 44 Ramen I, modelos 2016 y 2018, y hace un par de días llegó otro helicóptero nuevo. Compramos un MBB Bo 105 Bölkow que era de C5N; también teníamos un Skymaster que vendimos y acabamos de comprar un Citation II con pocas horas con el que brindamos servicios de taxi aéreo más orientado al turismo, sobre todo para los viajeros antárticos que llegan a Ushuaia y quieren ir a conocer lugares muy demandados como 28 de Noviembre/El Turbio, El Calafate, Torres del Paine, entre otros lugares.

 

— ¿Cómo se integra el mercado para estos vuelos, son turistas extranjeros, nacionales …?

— En tiempos prepandémicos era un 50% nacional y un 50% extranjero. El argentino disfruta mucho volar en helicóptero, tiene una fantasía especial. Vos, como piloto de helicóptero lo sabrás, estos aparatos despiertan un interés único, son atractivos. Desde que retomamos la actividad luego del COVID-19 los turistas son un 90% nacionales. Hemos hecho una gran promoción del destino Ushuaia y el vuelo en helicóptero, y ya casi que es un clásico entre las excursiones que se contratan.

 

— ¿Qué menú de vuelos ofrecen?

— Básicamente 4 recorridos estándar, pero armamos vuelos de medida, como Península Mitre, Isla de los Estados, en fin, Tierra del Fuego es muy generosa en cuanto a paisajes.

 

— ¿HELI USHUAIA presta otro tipo de servicios aéreos?

— Sí, no sólo hacemos vuelos turísticos, hemos participado de actividades de todo tipo, desde apagar incendios a rescatar turistas heridos que salen a caminar a la montaña y tiene un accidente o inconveniente, son servicios alineados con defensa civil y los bomberos; hicimos muchos simulacros durante estos años que nos permiten optimizar tiempos y que cada uno conozca bien su rol en un momento de emergencia. Entre las prestaciones más curiosas están los vuelos para la ciencia, ya que acompañamos al Centro Austral de Investigaciones Científicas (CADIC) a controlar la población de castores, que son plaga en esta zona, o recuperar los restos de un naufragio en Península Mitre.

— ¿Cómo se compone el equipo de trabajo de HELI USHUAIA?

— Tenemos 4 pilotos a los que hemos acompañado en su capacitación y 2 pilotos de la provincia que viven en Río Grande que volarán el avión que estamos incorporando ahora, dos ejecutivas de venta y administración, más 4 personas en logística y promoción, somos como 12 personas. El equipo de pilotos está compuesto por, Roberto Valdés que es mi socio, Daniel Moreira, Nicolás Centeno y yo . Entre los colaboradores de tierra están Sebastián Jauch, que es coordinador de operaciones terrestres y Edgardo Granados Quispe, que coordina equipamiento y mantenimiento. Martin Mella y Natalia Mella están en la coordinación empresaria y marketing, y tenemos dos pichones de pilotos que están haciendo los cursos, Agustín y Joaquín Valdés

 

— ¿Hay un poco de empresa familiar por lo que veo, cómo funciona eso?

— Imaginate que nuestros hijos nos acompañaron al aeroclub desde chiquitos. Los hijos de Roberto se engancharon con la aeronáutica desde siempre. Los míos no tanto.

Las generaciones nuevas nos ayudaron a eliminar el uso de papel dentro de la empresa, siempre fue mi intención, y hoy estamos camino a eso. En el área comercial ya eliminamos el 100%. Trabajamos mucho con plataformas digitales, implementamos un gestor de clientes para mejorar la experiencia prevuelo y formularios online para manejar la información de los pasajeros, coordinamos las operaciones con un calendario virtual al cual todos podemos acceder, incluso desde antes de la pandemia.

Luego del reportaje Edelio nos invitó a volar, despegamos de la base naval, también base de HELI USHUAIA, y volamos por la costa y las montañas cordilleranas hasta la Laguna Esmeralda. Fue un vuelo a paisaje abierto, bellísimas postales del sur argentino. Quien esto escribe ha volado helicópteros en buena parte de la geografía argentina, pero no todos los que abordamos el Robinson estaban acostumbrados a las posibilidades que brindan las alas rotativas, y menos en escenarios como esos. La conclusión es obvia: no se puede decir que se conoce Ushuaia si no se la ve desde el aire. ¡Y en helicóptero!

 

Te interesará
1 comentario
  1. Carlos De Leonardis dice

    Excelente nota, hermosa. Espero que esta difusión no despierte la clásica avidez de los funcionarios para “meterse” en el negocio, arruinándolo.

    Saludos

Cancelar respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.

AeroMarket - Noticias Aeronáuticas e Interés General. Copyright © 2018 Todos los Derechos Reservados.
Quiénes Somos       Contacto

Diseño y Desarrollo Web - Emiliano Gioia