Según varias agencias de noticias, los reguladores europeos habrían ordenado inspeccionar algunos aviones Airbus A380 al detectar fisuras en las alas del avión. Si bien en la página de la European Aviation Safety Agency (EASA) no aparece ninguna información al respecto la noticia ha circulado por todo el mundo. Para Reuters, por ejemplo, la directiva de EASA, afectaría a la parte del ala exterior de aeronaves que entraron en servicio en 2007. La misma fuente también informó que Airbus habría informado que el problema no significa riesgo alguno para el avión.
Se recordará que al comienzo de las operaciones de la aeronave se detectaron problemas en un A380 de Qantas, pero aquellos inconvenientes fueron rápidamente solucionados. No se sabe si las dificultades de ahora se relacionan con la misma sección del ala.
También son investigados casos de mareos, malestar y hasta vómitos denunciados por tripulaciones que vuelan este modelo de avión en la aerolínea TAP Air Portugal, incluso habría sindicatos que exigieron respuestas a reiterados informes presentado sobre este asunto.
En una nota que el fabricante envió a la aerolínea hace un mes, se reconocería que durante la fase de pruebas de vuelo se habrían identificado olores en cabina y que los mismos podrían proceder de la filtración de pequeñas gotas de aceite que se derramaron en el compresor de alta presión, las cuales podrían haber sido tomadas por el sistema de aire acondicionado de la aeronave.
Según Airbus, el problema no afectaría a las personas y se estaría trabajando para solucionarlo definitivamente.