El avión “bombero” ruso Be-200ES, estará al servicio de Grecia

Es el único anfibio a reacción que combate incendios

El avión ruso Be-200ES. Foto: UAC / Rostec State Corporation

El avión ruso Be-200ES aterrizó a fin de junio en Atenas para participar del programa de combate de incendios de esa nación europea.

La versión “ES” de la aeronave está equipada para la lucha contra el fuego. Gracias a sus alas altas, con dos turbinas instaladas sobre ellas, el avión utiliza lagos y ríos para cargar sus depósitos con agua que, adecuadamente combinada con productos retardantes, servirá para mitigar los incendios forestales o de grandes extensiones de tierra.

El dibujo original del Be-200, también denominado Altair, es del ingeniero ruso Gueorgui Beríyev. La aeronave fabricada por Irkut, voló por primera vez en 24 de septiembre de 1998 y fue presentada al mundo en el París Air Show de junio del año siguiente.

La versión Be-200ES, equipada para luchar contra el fuero, es la única fabricada por Beriev Aircraft Company (UAC / Rostec State Corporation). El Be-200ES es el único avión a reacción anfibio del mundo por poder operar velozmente en la carga de hasta 12 toneladas (metros cúbicos) de agua, más 1,2 metros cúbicos de agentes químicos retardantes, lo que duplica la capacidad del avión similar más próximo, el canadiense Bombardier 415. Además, la aeronave tiene un buen desempeño en la relación cargas y descargas de agua por hora.

El proceso de carga de agua se realiza a una velocidad entre 160 y 190 km/h, en un tiempo estimado de 12 segundos. Otra característica notable es que este amfibio, comparado a otros aviones del mismo tipo, es totalmente presurizado, lo que le permite cumplir un amplio rango de diferentes misiones y volar en traslados a mayores altitudes que la competencia.

En el diseño del avión se tuvieron en cuenta la regulaciones de la FAA FAR-25 que le posibilitan obtener certificaciones internacionales.

La configuración estándar incluye cockpit para piloto y copiloto un baño y 8 secciones que forman los depósitos principales para el agua que están situados debajo del piso del interior de la aeronave. La secuencia de descarga de agua se puede programar o configurar para que sea total, progresiva o parcial.

 

En 2020, un Be-200ES voló, contratado por el gobierno turco, más de 200 misiones a lo largo de 3 meses, totalizando unas 450 horas de operación.

 

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